jueves, 30 de abril de 2015

Día del Niño 2015

Cuando era niña mi más grande temor era que al ir al sanitario, saliera un cocodrilo y me comiera.
Tenía tanto miedo que más de una vez pensé en escribir una nota de despedida para mi Mamufa diciéndole que si no me encontraba en la casa, era porque había sido devorada por un cocodrilo que vivía en el drenaje.
Hoy que pienso en ello me da risa el recordar los temores infundados de mi infancia, que, dicho sea de paso, en ese tiempo me parecían muy reales y posibles.
Quisiera creer que también mis temores de hoy son infundados, y mi yo anciana un día sonría al recordarme de 30 y tantos, temblando de miedo por mis cocodrilos actuales.
La infancia no solo es una edad de oro, para quienes recuerdan bien el pasado, también es una enseñanza de vida.
Feliz día a nuestro niño interno, que siempre está dispuesto a darnos la valentía que necesitamos para seguir adelante.

3 comentarios:

El hombre del traje gris dijo...

Yo muchas veces pienso en la infancia y me parece casi como una vida pasada, tantas cosas parecen haber cambiado y desaparecido...
Y vaya que no eres normal, nunca había oído de nadie que le tuviera miedo a la taza del baño... :p

Sofy Lica dijo...

Desde hace seis años que no entraba al mundo blogger algunos de mis favoritos ya no existen o la última entrada es de hace más de 4 años, me da gusto que el tuyo siga vivo =)

jess dijo...

@Pupilo, no es una vida pasada, es de donde venimos, y como decía la Santa en "La Grande Belleza": Las raíces son importantes :)
Un abrazote!!

@Sofy, pues jejeje... recién regresé.... uno siempre regresa a la escena del crimen ;)


Grazie Mile por sus comentarios!!!