mi lucha

“La soledad era para mí un hogar y un refugio en las tinieblas.”
Sinuhé el Egipcio.- By Mika Waltari.

Los sábados por la noche, de un tiempo a la fecha, suelen traer a mi vida, mareas desconocidas… que golpean mi estabilidad emocional y mental….

Y otra vez comienzo a sentirme rara.
Como antaño.

“Mira mami, esa niña está parada únicamente, no me responde, ¿por qué no me responde?”
“Vámonos cielo, está esperando a su mamá.”

¿Qué he esperado desde siempre?
Respuestas a mis continuas dudas.
Al principio eran las respuestas que me imponían los demás.
Y yo, para ser normal y aceptada en sociedad, las elevaba a la categoría de “verdad absoluta”.

“Sé que eres una de nosotros, uno los reconoce en cuanto los ve.”
“El camino que yo te puedo mostrar, exige desprendimiento de todo lo que tienes en estos instantes, pero a cambio, te dará todo lo que sé que tu interior anhela fervientemente.”
“No puedo dejar a mi familia, gracias, en verdad gracias.”
“Cuando estés lista y dispuesta, sabes dónde encontrarme.”

Vuelvo a ser la rara de siempre.
La que no habla. Permanece en silencio. Y se desconecta del mundo.

¿Por qué juegas conmigo así?
¿Por qué te sacias al verme así, humillada y ofendida con esta naturaleza humana?
¿Qué de grato consigues haciéndome tan vulnerable?

Cuánto tiempo de estos largos 26 años, realmente han valido la pena…. Cuánto ha transcurrido realmente…
Me estoy derrumbando nena.
Todo en mi interior está siendo sacudido violentamente, y yo… ya no soy la chica rebelde de antaño.

“No puedes hablar abiertamente de esas cosas, porque la mayoría de la gente, no lo entiende y te tacha de loco.”.

¿destino? ¿casualidad? ¿una prueba más?

Probar qué.

Una mañana, en misa, hace ya tanto tiempo, una señora enfrente se desvaneció y su esposo la tomó para llevarla fuera y respirara.
Una voz en mi interior me decía:

“Tócala, tócala y transmite tu energía, verás cómo ella se recupera inmediatamente.”

“Me estoy comenzando a volver loca… Por favor, no más voces, por favor ya ni una más….”

Te equivocaste de lugar y de persona.
Y yo estoy pagando muy caro tu error.
¿Por qué yo?

No entiendo mi existir.
De verdad que no.
No quiero abrir esa puerta y dejar salir a ese ser que duerme dentro de mí.
Porque sé que la mujer que soy ahora, no volverá nunca más.


Voz: Vas a ser mía, y te hundirás en la más profunda oscuridad que acaso hayas imaginado alguna vez.
Voz: ¿Te creías especial y una de Sus favoritas?
Voz: Espero que estés preparada, para lo que está por llegar.


No, no me vas a vencer.
Yo soy más fuerte que tú, siempre lo he sido.
Estoy en tu territorio, y aún así, no me verás derrumbada ni una vez más.
Humíllame, oféndeme, goza mi dolor… porque te voy a cobrar una a una, cada lágrima que me has hecho derramar.
Así que por última vez, y por tu propio bien, desaparécete de aquí y vele a chingar la madre a alguien más.
Porque el sábado en la noche, mi puente hacia el infinito, me dijo cuál era tu punto débil.
Y ¿sabes?
Ya no huyo de la oscuridad, porque siempre ha habido una luz en mis tinieblas...