martes, 28 de septiembre de 2010

Inigualable e Intransferible.

“Ven acá…”- Me dijo él mientras me acercaba a su torso desnudo.

Al hacer eso, él estaba rompiendo la regla número uno del mundo de los affairs, estaba rompiendo la barrera que separaba su mundo del mío, y al acercarme a su cuerpo y colocar delicadamente mi cabeza contra su corazón, podía sentir la manera en que éste palpitaba, pero también podía sentir la manera en la que el mío galopaba a más velocidad.

Y mientras su calor corporal transmitía su temperatura a mi cuerpo, yo temblaba al recordar la primera vez que habíamos compartido una cama, donde al finalizar el acto carnal, él se había recostado poniendo distancia de por medio, y yo me había recostado sintiéndome segura con esa distancia de por medio.

Pensé que así sería para siempre.

Así que esa tarde, mientras yo me disponía a entrar en contacto con mis propias sensaciones colocada a medio metro de por medio, él frenó mi movimiento, y con su suave voz me ordenó dulcemente que nulificara la distancia que separaba ambos mundos.

Y mientras en mi cerebro sonaban todo tipo de alarmas, mi corazón palpitaba intensamente al sentirse cerca del de él.

Su cercanía física eliminó la seguridad que me brindaba la distancia inicial.

Pero le brindó oxígeno a mi órgano vital.

“Si pudieras cambiar algo de tu vida, ¿qué sería?”- Me preguntó él.

Yo le respondí una tontería.

La verdad es que si pudiera cambiar algo en mi vida, seguramente él no hubiera estado conmigo ese momento.

Y esa tarde no la cambiaría por nada del mundo.

Mientras él acariciaba mi pelo revuelto y me platicaba de sus temores y manías, una parte de mí también moldeaba sus temores y manías.

Espero sinceramente que la memoria de su corazón, no olvide la manera en que renovó al mío.

Ahora que el tiempo ha pasado, y he conocido nuevas maneras de pensar, me he dado cuenta que no importa qué nuevas manías y temores toquen a mi puerta, la parte de mí que le perteneció y que todavía le pertenece, simplemente es inigualable e intransferible.

lunes, 27 de septiembre de 2010

¡Vamos juntos hasta Italia!

Las leyendas urbanas dicen que cuando Napoleón Bonaparte pisó la Plaza de San Marcos en Venecia exclamó que no había Plaza más bella en toda Europa.

Y muy seguramente, estaba en lo correcto.

Lugar que vio nacer tanto al viajero como al seductor por excelencia, Venecia permanece incólume ante el inexorable paso del tiempo.

Venecia fue un gran imperio marítimo, dominaba las rutas comerciales y de ahí su gloria y esplendor.

Encantadoramente rodeada de canales, la forma más fácil de trasladarse entre las islas es vía “vaporeto”, y así en vaporeto fue cómo me trasladé a la Plaza de San Marcos.

Dos columnas en cuya punta se encuentra el león alado que representa al Evangelista, dan la bienvenida al lugar más concurrido de la isla, puede uno ver el Palacio Ducale que era la sede del Duxe quien era el “gobernador” de Venecia, pero por cuestión de tiempo no puede entrar, así que preferí hacer fila para entrar a la obra de arte Bizantino y gótico “veneciano” del lugar: La Basílica de San Marcos, construída especialmente para mandar traer los restos del Evangelista Marcos que yacían en Etiopía.

El frente de la Basílica está compuesto por varias columnas, cada una de las cuales está hecha de un material diferente, materiales que eran el botín de guerra, así que los venecianos orgullosos mostraban lo que robaban de otros pueblos, porque era señal de poderío.

A lo alto de la Basílica se puede observar la imagen del Duci que se encuentra hincado ante el León Alado, reconociéndole así el líder del Pueblo un Poder Supremo a la Iglesia.

Venecia es lo que le sigue a caríiiiisimo!!!!!
Porque todo se manda traer por barco.

No hay lugares para sentarse para evitar a los mendigos, así que si uno quiere descansar, tiene que sentarse en una cafetería, y habrán de saber que en cuanto uno coloca su trasero en las sillas del lugar, el producto ofrecido eleva su precio horrores…

Yo me comí el amaretto más caro de toda mi vida…. Doce euros por una nieve con licor…. DOCE…..

Cuando aquí lo que más pago por una nieve son quince devaluados pesos mexicanos, pfffff Rafa, nuestro muy sabroso guía, nos decía: “El que convierte, no se divierte.”.
Y en Venecia eso aplicaba a la perfección.

Para acabarla nos tocó un clima del nabo.
Llovió y llovió y llovió, y por lo mismo, las góndolas estaban varadas.

Pero… a las cuatro pm unos ligeros rayos de sol asomaron al cielo, y Fmi y yo corrimos a meternos a la fila, y a subirnos a dar el paseo en góndola porque….. ir a Venecia y no subirte al paseo en góndola, es … No haber ido a Venecia.

Mientras nuestro gondolero nos decía: “Mi padre y mi abuelo fueron gondoleros, así que yo soy gondolero de vocación, miren ahí! La casa de Giacomo Casanova!!”… y Fmi y yo veíamos y decíamos: “Wóoooorales!!”.

Lejos de lo que opinan muchas personas, para mí los canales no huelen mal, de hecho hasta toqué el agua y no me pasó nada, no se me cayó, ni se manchó ni me salieron nidos de bacterias. Nada de Nada.

Característico de Venecia, es que en sus plazas hay chingo de palomas por todos lados, palomas por aquí y palomas por allá, mucha gente dice: “Awwww ternuritas palomas!! Quiero mi foto con la paloma!! Quiero alimentar a las palomas!!!”, pero la verdad es que SHU, SHU palomas gorupientas y destructoras de los monumentos históricos, Rafa, nuestro muy sabroso guía (Again! Ja!) nos dijo: “Si Rafa ve que alguno de mis turistas alimenta a una paloma, lo dejo aquí, háganle un favor al mundo y maten a una paloma.”.

Otra cuestión muy peculiar de Venecia, es que es muy común ver corriendo senegaleses que van huyendo de la policía porque son indocumentados que venden imitaciones de bolsas padrrrrrísimas!!!!! Yo me compré una muy nice bolsa D&G por 20 euros…. Luego me enteré que me habían estafado y debí regatearles y hasta en 10 euros la hubiera comprado…. Hijos del $%$%&.

También es clásico el material de Murano, por todos lados ve uno aparadores con increíbles accesorios carísimos pero muy lindos. Yo me compré un anillo de 22 euros… causa de ello, debido a mi anillo, a mi bolsa y a mi amaretto, me quedé más pobre que un mendigo.

Y bueno, la verdad es que de Italia sólo conocí Venecia, mi presupuesto no me daba para más, ja! Pero, la gente más horny (No lo más guapos, pero sí los más cachondones) per se, fueron precisamente los italianos.

No tienen idea, esos hombres y mujeres exudan sexualidad, despiden feromonas a más no poder, yo hasta me sentí atraída por varias féminas que aparte de todo, se visten súper, súper bien…. No, no, no!!! Con razón Italia siempre será puntera en modo, tienen un mega estilo al vestir que uno se queda boquiabierta de envidiosa!!!

Y bueno, el idioma italiano es muy fácil de entender, inclusive es más fácil entender el italiano que el portugués.

Por otra parte, la comida…. Mmmmmm, la mejor comida salada que probé en mi viaje fue en Europa, la pizza es una delicia!! No es como lo que venden aquí, sino que está delgadita, delgadita y el queso mmmmm, yomi, yomi!

Si alguno de ustedes va un día, yo le recomiendo probar la salchichonería Speckt, que es tipo tocino pero con muchísimo mejor sabor.

Ya una vez arriba del vaporeto, toda mojada debido a la lluvia, con un muy nice anillo de murano, con mi bolsa D&G, dejé atrás las tierras de Marco Polo custodiadas sigilosamente por el León Alado.

Algún día regresaré para conocer Roma, Florencia y Milán.

Mientras tanto, Ciao bella Italia!

sábado, 18 de septiembre de 2010

Agitado, No Revuelto.

Mi amiga Sophie y yo llegamos a ese restaurante.

Un lugar medio exuberante de una Ciudad vecina al que no acostumbro ir debido a que sus precios son un poco costosos.
Pero de vez en vez, es bueno consentirse.

Y bueeeeno, Sophie es la amiga ultra trendy socialité que todas debemos tener cuando queremos salir en plan “ladies night”.

Sophie me platicaba acerca de su trabajo, tendencias de moda otoño-invierno, nuevas fragancias de temporada, acontecimientos familiares, noticias de personas en común y… hombres.

Entonces, yo la miré pícaramente y pregunté: “¿Jugamos?”.

Ella sonrió asintiendo, entendiendo cabalmente el juego que solíamos practicar en nuestros momentos de ocio y comenzamos.

“Yo empiezo.- Me dijo.- Seis en punto del reloj desde mi asiento. Él viste de jeans con camisa negra y saco beige y su amigo viste de pantalón casual azul marino y camisa blanca.- Son de edad similar, así que yo digo que se conocieron en bachillerato, pero el de jeans eligió la carrera de diseño de interiores y el de pantalón casual eligió algo de administración, ambos acaban de salir de trabajar, obviamente no tuvieron puente y comentan acerca de sus respectivas familias y posibles affairs.”.

“Cómo sabes que tienen familia?”.- Le respondí.

“Observa su anular derecho, de ambos.”.- Contestó.

“Ja! Nunca falla eh?”- Repliqué mientras tomaba un trago de cerveza.

“Admitámoslo, están educados a la antigua, actualmente, casi todos se lo quitan antes de ir a un lugar donde puedan encontrar a un par de encantadoras solteras a las cuales puedan ligar.”.- Dijo ella mientras tomaba un poco de su martini.
Risa de ambas.

“Okay, voy.- Dije un poco calibrada debido a las tres cervezas que llevaba ingeridas.- Tres en punto. Él lleva pantalón formal oscuro y camisa azul. Ella viste jeans y una blusa sencilla color amarilla…. Ammm….. Él está casado, lleva puesta su argolla que brilla hasta acá, ella no lleva nada en sus dedos, pero también está casada o vive en unión libre….”.

“¿Cómo lo sabes?”.- Interrumpió Sophie mientras volteaba discretamente hacia la mesa indicada.

“… Obsérvala bien, en su conjunto, no es una mujer que siga los convencionalismos sociales, tan es así que aún cuando se ve que está rondando por los cuarenta, no viene a un lugar caro vestida como para impresionar a nadie, ni siquiera a su comensal.-”.- Comenté mientras desviaba un poco la vista para no parecer obvia.

“Ella se ve claramente mayor que él, yo a él le calculo nuestra edad máso, y no creo que vengan a cerrar algún trato de negocios, así que impresióname con su historia, jess…. Tú eres experta en historias de mujeres que salen con pubertillos-”.- Dijo Sophie sonriendo.

Yo sonreí mientras Sophie le decía coquetamente a nuestro medianamente apetecible mesero (es cierto, es cierto… estoy obsesionada con los meseros!! Jaja):

- “Otro vodka Martini por favor.”

Yo me recargué hacia atrás y exclamé en voz alta: “Agitado, No Revuelto.”.

- ¿Perdón? – Dijo el sabroso que nos atendía.

Sophie rió y le respondió ante el claro desconocimiento de la frase que yo había dicho: “Nada, nada, ni una más para mi amiga JESS por favor!!”.

Nuestro mesero sonrió y yo agradecí a Sophie el haberle dicho mi nombre al nene.

- Pero regresemos al reto de la noche, ¿Qué hace esa pareja en esa mesa? – Insistió Sophie.

Yo volteé a verlos de reojo nuevamente. Sólo él miraba la carta ante la mirada curiosa de la dama. Ella no se percataba de los nervios de él, pero yo podía ver la manera en que su zapato izquierdo golpeaba frecuentemente el suelo. Ella, sin más accesorios que unos aretes largos artesanales, y sin un sólo gramo de maquillaje en su rostro, no necesitaba de ninguna ayuda artificial para resaltar su feminidad. Inclusive se veía más femenina que Sophie o que yo, ya saben… “Quien de amarillo se viste…”. Él en cambio, iba vestido de manera pulcra, sin una sola arruga en su camisa a pesar de que ya eran las nueve de la noche. De físico impecable, complexión delgada pero aún a pesar del atuendo formal, se podía ver su abdomen trabajado. El clásico tipo carita que la mayoría de las féminas, si no es la totalidad, soñamos con pescar y presumirlo en sociedad.

Coincidentemente, su mesero era el mismo sabroso que nos atendía a Sophie y a mí.

El nene analizado cerró la carta, habló con nuestro muy sabroso mesero, y volteó a ver a la nena que seguía mirándolo de una manera singular.

- Okay Sophie, antes de darte mi teoría necesito quemar dos de mis ases.

- Tienes manga ancha para hacerlo, mi querida amiga.- Dijo Sophie mientras sorbía un poco de su Martini a la 007.

En cuanto pasó nuevamente mi muy sabroso mesero levanté mi mano y le dije:

- Otra cerveza por favor, bieeeeen fría. Sólo por no dejar… -y me acerqué al sabroso para que sólo Sophie y yo escucháramos- Será nuestro pequeño secreto y te daré el 20% de propina,- decía yo mientras Sophie reía al ver de lo que yo era capaz con tal de afianzar mi teoría.- ¿Qué fue lo que ordenó el hombre de la mesa de allá? –dije mientras señalaba con mis cejas al nene analizado.

Mi mesero rió y presuroso me dijo en voz baja:

- Pidió la entrada de la casa para dos, y pidió igualmente para ambos Chateaubriand (confieso que tuve que googlearlo… pfffff) y un Merlot chileno *insértese aquí nombre raro que no recuerdo*, es la mejor cosecha que tenemos.- Susurró nuestro espía mientras yo me inclinaba para para mostrarle mi escote.

Me incorporé nuevamente e hice un guiño hacia él.

- ¿Victoria verdad?- dijo mi sabroso espía y yo asentí.

Volteé a ver a Sophie quien me estaba viendo divertidísima mientras exclamaba reteniendo una carcajada: “Eres una zoooorrrrraaaaaaaaa!!! Jajajaja! Por donde le veas, por lo facilita y por lo astuta!!!”.

Yo no pude evitar contener mi carcajada y le dije: “…. Escuchaste lo que pidió? Yo en La Vida he probado ese corte, ni siquiera lo conocía!! Y pfff Merlot?? Pffff…. Míralo bien, debe tener a lo más tres o cuatro años más que nosotras!! Yo pensaba que pediría de entrada no sé, calamares, y pescado con vino blanco espumoso de platillo fuerte, pero éste me está saliendo más cabrón que bonito y miraaaa que está requeté chulo el méndigo!! –risas de ambas-… quemaré mi segundo y último as hasta que ellos estén en la sobremesa, mientras tanto seguiré observándolos.”.

Sophie sonreía al puro estilo de Gaby Vargas, y a diferencia de mí, no perdía la compostura un sólo segundo.

De repente, ya no estábamos interesadas en saber los nuevos colores de las sombras Dior, el nuevo estilo de las bolsas Coach (sí, sí, soy mujer y tengo mi lado superficial, snifffff), las nuevas reformas legales, la próxima boda de nuestro amigo Alex, los eventos culturales que habrá ahora en el Festival Internacional Cervantino ni las mejores folladas de nuestras vidas… Estábamos totalmente enfrascadas en la misteriosa pareja que estaba a las tres en punto desde mi asiento.


- ¿Son amantes? – me preguntó Sophie mientras mordía su labio inferior y sus ojos azules volvían a brillar.

- Sí.- dije titubeando un poco.- Pero hay algo que no cuadra….-

- ¿Hay algo que cuadre en el mundo de los affairs?.- Me preguntó Sophie mientras bajaba la mirada y acariciaba la copa de su bebida.

-…. ¿Quieres que me embriague tanto que no pueda regresar manejando a mi Ciudad verdad?- Dije tratando de encontrar una respuesta divertida ante la pregunta más difícil que Sophie me hubiera hecho alguna vez en la vida.

-Yo digo que son esposos, que vienen a jugar hoy a los amantes.- Dijo mi romántica amiga.-

Hubiera sido la mejor teoría de no ser por el nerviosismo que noté en él al momento de leer la carta.

Sophie pidió otro vodka Martini, yo otras dos Victorias, y ellos estaban terminando su cena y su botella de vino.

A esas alturas, y obviamente con ayuda de la vid, él ya se veía más suelto, no quedaba nada de la seriedad inicial, sino que se conducía con mucha más naturalidad, y he de confesar que tenía una hermosa sonrisa, y ella coqueteaba abiertamente con él mientras acariciaba su pelo castaño claro perfectamente bien peinado, y su mirada curiosa, había sido desplazada por risas intermedias entre las sonrisas de Sophie y mis carcajadas.

- Hora del veredicto mi estimada jurisconsulta.- Me dijo Sophie.

-Voy a quemar mi último as, y para eso necesito ir al baño…. We pinches cervezas… si nomás llevo como dos..- dije riéndome.- Ah… qué causalidad… el sanitario queda precisamente por las tres de mi reloj.

Pasé al lado de ellos mientras tomaban las últimas gotas de vino, y de regreso del sanitario sólo pude observar perfectamente la mirada de él.

Si creía que su sonrisa era la cualidad física más seductora, esos instantes me percaté de que lo mejor que tenía el susodicho eran sus increíbles ojos, negros, profundos, brillantes… Pero en ese momento, estaban inyectados de verdadero frenesí mezclado con lujuria.

Pasé a su lado, y las risas de ambos no sonaban más.

Ahora la sensualidad del silencio y el brillo de las miradas lo habían suplido.
Me volví a sentar y le dije de manera inquieta a Sophie que era hora de pedir la cuenta.

- ¿Y bien…?.- Volvió a insistir mi paciente amiga.

Yo me había estremecido al recordar la única vez que un hombre me ha mirado así.

- Tú ganas amiga, yo me declaro incompetente para dar mi opinión…- dije mientras mi mente volaba hacia otros lugares del pasado.

- ¡Ah no!!! Tú NUNCA has dejado de dar tu opinión, ¡vamos!

Volteé nuevamente a verlos, estaban parándose para irse a otro lugar, pero seguían sin pronunciar palabra alguna ya.

Yo permanecí inmóvil recordando esos increíbles ojos masculinos que alguna vez me habían desnudado con la mirada al punto de hacerme desviar la mía.

Los ví por última vez mientras salían del restaurante, él la dejaba pasar caballerosamente, al unísono que colocaba su brazo alrededor de la cintura de ella, y su mano bajaba delicadamente a la bolsa trasera de los jeans de ella.

Le dí el último trago a la última cerveza de la noche, miré a Sophie y le respondí:

-Son dos amigos que van a hacer el amor por primera vez.

jueves, 16 de septiembre de 2010

La Patria de jessie.

-¿Y él quién es Papufo? – decía la pequeña jessie mientras su padre sostenía fuertemente su mano.
-Es nuestro diputado jessie, va a dar su mensaje patriótico.- decía el padre de jessie mientras veía la mirada brillante de su pequeña hija.

Cada noche del 15 de Septiembre, cuando mi papufo estaba en casa, solía llevarnos al jardín principal de esta Ciudad a “dar el grito”.

Caminábamos las cuatro cuadras que separaban la casa paterna del jardín, yo veía las multitudes a mi alrededor dirigiéndose hasta las tarimas con bocinas indicando que ahí personajes importantes darían un mensaje al pueblo reunido, un mensaje que tocara vibras e hiciera creer que había muerto el mal Gobierno y en su lugar, ahora teníamos una Nación libre y soberana.

Y mientras papufo buscaba con la mirada a los políticos de mi Ciudad, yo buscaba ansiosamente al algodonero.

Ya una vez con mi algodón en mano, mi boca rodeada de azúcar y mi mano sujetando fuertemente a mi progenitor, esperábamos de pie a los oradores del pueblo, mientras que de fondo sonaban canciones populares mexicanas.

Hermosas canciones como “Caminos de Guanajuato”, “México lindo y querido”, “El sinaloense”, “El son de la negra”…. O…. en su defecto, música más in como las muy odiadas “Pollito con papas, papas, papas…” o “Si tú quieres bailar, Sopa de caracol, yeah! Guatanei tunsun chupi pa’ti chupi pa’mi” ……

La tarima era colocada a espaldas de la Iglesia del Señor del Hospital, famosa por su Cristo Negro, al cual por cierto, hace unas semanas, le robaron su corona de oro….. y a un costado de dicha Iglesia, se encuentra la Presidencia Municipal de mi Ciudad.

En frente de dichos edificios, se encuentra el kiosco, los árboles, y antes de regresar a nuestra tarima, se encontraba la atracción principal (al menos para mí) de la noche: El castillo.

-“Conciudadanos, estamos aquí reunidos para celebrar el Aniversario de la Independencia de nuestro país, para recordar a todos aquellos caudillos que dieron su vida porque el día de hoy, nosotros y nuestros hijos seamos libres y tengamos mejores oportunidades de vida….. Refrendemos siempre el compromiso adquirido por nuestros antepasados de tener una Nación justa y equitativa, ¡Muera el Mal Gobierno! ¡Mueran los gachupines! ¡Viva México! ¡Viva un México libre!”-

La gente a mi alrededor aplaudía y gritaba eufórica.
Inclusive yo, con mi boca llena de azúcar, gritaba: “¡Viva! ¡Viva!!!”.

Todas las porras eran el señalamiento de que el castillo estaba a punto de iniciar.
Papufo nunca me dejó acercarme demasiado al castillo, y me contaba historias de niños que habían perdido los ojos debido a la cercanía con los fuegos artificiales.

Yo miraba hacia el Cielo, y a mi alrededor la gente miraba también hacia el mismo Cielo, tan mío, tan nuestro.

El castillo iluminaba la noche oscura que recordaba aquella madrugada donde la historia dice que en el pueblo de Dolores Hidalgo, un sacerdote convocó a levantarse en armas en contra del yugo español.

Para mí eso era la Patria, un discurso efusivo que tocaba vibras y obtenía aplausos y gritos de la multitud; una canción popular; un algodón de azúcar; la mano de mi papufo sosteniendo fuertemente la mía.... una luz intensa en el Cielo que opacaba la oscuridad que reinaba a nuestro alrededor.

martes, 14 de septiembre de 2010

Un Danubio Azul.

Situada a orillas del Río Danubio, era turno de llegar a la Ciudad con mejor calidad de vida en el año 2010.

La Ciudad donde nació el padre del psicoanálisis, la ciudad que fue sede de uno de los movimientos intelectuales más fuertes del siglo XX (Círculo de Viena), la Ciudad que tiene la Ópera más famosa de todo el mundo (DIVINA!!!!) y por si fuera poco, la Ciudad que fue capital de uno de los imperios más grandes de todo el mundo.

Ehhhh? Con un curriculum así qué más le puede pedir uno a la vida caray!!!

Gracias al Cielo que por fin nos hospedamos en un hotel céntrico pero medio pulgoso, y a dos estaciones de metro o nueve cuadras, se encontraba el Ringstase que es la calle principal de Viena, y en donde se encuentran sus principales monumentos y edificios históricos y gubernamentales.

A medio camino de nuestro hotel y el Ringstase, se encontraba “La barriga de Viena”, que es un mercado tipo mexicano, pero más limpio, donde hay puestos y más puestos de comida, y como Fmi y yo moríamos de hambre, decidimos hacer parada técnica.

Para dato cultural, se habla el idioma alemán y es una ciudad cara. Mientras que Amsterdam, Berlín y Praga eran “baratas”, París, Viena, Venecia (¡!!!!!!!!) y Berna fueron caríiiiisimas.

Volviendo a la Barriga de Viena, jiji, ese nombre me gustó, Fmi y yo estuvimos observando detenidamente cada puesto, y en eso…. Lo vimos ahí…. Frente a nosotros…. En su máximo esplendor….. un trompo de carne, cassssi idéntico a los trompos de carne al pastor mexicanos!! Sólo que todo flacucho, y de color grisáceo, como sea, Fmi y yo sentimos la manera en que nuestras glándulas salivales comenzaron a funcionar rápidamente evocando un sabor conocido y delicioso, así que corrimos a ese puesto que tenía a un cliente de pie esperando su pedido.

Mientras el cocinero preparaba lo que ahora sé que es comida turca, y llamada Kaab, Fmi y yo vimos la manera en que se come: Agarras un bolillo enorme en forma de cono, con la carne adentro, además de lechuga, jitomate, cebolla, CHILE (chile piquín que nunca supe en qué momento probé!!) y…. el ingrediente especial….. Una deliciosa crema agria que le daba un sabor diferente a la carne insípida del trompo.
Y ahí, en ese pequeño local de Viena, descubrí otra verdad absoluta…. El idioma universal no lo es el inglés, no señor!!, el lenguaje universal son las señas. Sí que sí!

Mientras le entregaban sus tortas turcas al cliente que estaba antes que Fmi y yo,
Fmi dijo al comprador: Excuse me, is it delicious? (señalando a la torta tamaño caguama).

Y ante la mirada risueña del vendedor (la gente de Viena es cálida y amable), el comprador sonrió y dijo: “Mmmmmm yomi yomi ummmmm ñam ñam” (Mientras su dedo pulgar de la mano derecha señalaba para arriba, y su mano izquierda acariciaba su panza como diciendo ummmmmm delicioso!!).

Fmi y yo reímos, y al ver el precio de la torta (3 euros!!!!!!!!!!!! Una ganga!!!!!! No conviertan… no conviertan….), vimos al guapéeeeerrimo (Marichuy, juro, juro que éste sí te hubiera gustado!!! ) vendedor que nos veía con cierta curiosidad…..
Fmi y yo le devolvíamos la mirada curiosa, ahora que lo pienso debe de haber sido algo sui generis, observar la escena completa, así como cuando ven a un pajarillo en la azotea que ve a otro e inclina su cabecilla, y el otro, por mimetismo, también la inclina, así nos veíamos nosotros! Jaja.

Y en eso Fmi y yo dijimos algo así como: “Mmmm aló? Mmmm…. (señales al don que se acababa de ir)”, el vendedor entendió perfectamente la idea y comenzó a preparar nuestras tortas.

Fmi estaba hambriento a esas alturas del partido, y cuando el vendedor extendió la primera, Fmi corrió a agarrarla, y en eso el vendedor seriamente dijo: “Ah , ah, not, ladies first”, y sonrió y me la dio a mí. Yo me boté de la risa y volteé con Fmi y le dije: “Ándale pinche anticaballeroso, te hacen falta lecciones de cómo tratar a una dama”. El vendedor sonrió adivinando lo que decíamos al ver a Fmi muerto de pena y a mí atacada de la risa, al final, pagamos y nos fuimos al estacionamiento a comernos nuestras tortas.

Comenzó a anochecer y nos fuimos en búsqueda de la ringstase.

Si de día es hermosa, de noche es impactante.

El buen gusto se nota por doquier en Viena.

Ya una vez en el centro, entramos a una linda y muito cara calle peatonal, llena de tiendas turísticas, casinos, restaurantes caríiiiiisimos, artistas callejeros, una gran GRAN tienda (ya si no) de Swarovski (linda, linda, linda!! como todo en Viena) y….. la Iglesia (o Catedral, no tengo el dato) de San Esteban, la cual está en remodelación, pero aún así, denota su estilo gótico.

Fmi y yo entramos a rezar un poco.

Y mientras yo rezaba, metía mi mano a mi bolsa izquierda de mis jeans y sujetaba con fuerza mi cuarzo rosa, hoy sé, que ese objeto rosado, es mi punto de unión con Él. En ese cuarzo, converge la esencia de ambos, y sé que trayéndolo a él conmigo, nunca nada malo me pasará, y se renovará nuestra promesa de Amor, un amor que va mucho más allá de lo humano, y en cuyo nombre se harán grandes proezas.

Y saliendo de ahí, Fmi y yo nos dedicamos a escuchar frases en español, un español obviamente muy mexicano, de gente que salía de las tiendas diciendo: “Ahhh no mames, qué pinche caro está esto!”…. eliminando así, las ganas de entrar a ver qué se vendía ahí. Ja!

Pero, las noches en Viena se tornan mágicas si uno (ES PARADA OBLIGATORIA, OBLIGATORIA, MÁS TODAVÍA QUE EL MOULIN ROUGE) entra a escuchar un concierto de cámara, donde se disfrutan de valses de los austriacos Mozart y Strauss.

Sublime, realmente sublime.

Y ahí fue donde me enamoré de El Danubio Azul…. Si antes y gracias a los looney tunes había escuchado ese vals, ahora sabía su nombre, su autor y su trascendencia.
Y de igual manera, si por las noches uno quiere divertirse, puede trasladarse hacia las afueras de Viena, al barrio de Grinzing, que es donde se encuentran todos los viñedos y hay muchísimos restaurantes que ofrecen un buffet y el vino tinto de la casa. Yomi, yomi, yomi!! Fue la única vez que me embriagué en el tour, y por algo me dijo mi papufo que no lo hiciera, porque al día siguiente….. no me la acababa con la cruda, haciendo maletas, ni disfruté lo que conocí y demás, pero bueeeeeno, ir a Europa y no embriagarte de vino tinto una vez en la vida, es simplemente no haber vivido. ;)

Pero volviendo a Viena, hay dos Palacios Imperiales en ella, el lindo, lindo, lindo Palacio Schonbrunn (que significa algo de fuentes, pero no recuerdo bien) que fue residencia imperial de los Habsburgo, y en cuyos dormitorios se recuerda a Francisco José, Sisi, Napoleón, María Teresa, y el Palacio Hofburg.

También aprendí ahí la diferencia entre palacio y castillo. Palacio es el lugar donde descansa la realeza, mientras que castillo es una fortaleza, así, puede haber un palacio dentro de un castillo, pero Nunca un castillo dentro de un palacio.

Por otra parte, hay muchos museos en Viena, hay uno muy famoso dedicado a la emperatriz Sisi, y creo, creo, porque no entré jijiji dedicado al pintor austriaco simbolista Gustav Klimt (famoso por su obra de “El Beso”).

Y bueno, como este post es un mega post y yo creo que ya muchos dejaron de leerme, y los que me han seguido hasta aquí ya han de estar pensando: A qué hora termina esta pinche vieja de escribir….. no diré nada de la Historia más o menos conocida por todos, pero para finalizar hablaré de un personaje que llamó mi atención y que desconocía hasta ese entonces.

Eugenio de Saboya.

Eugenio de Saboya fue hijo del Conde de Soissons y de Olimipia Mancini, pero todos murmuran y la leyenda urbana dice que el verdadero padre de Eugenio fue el monarca francés Luis XIV (aquél que mandó construír el Palacio de Versalles y que se hizo célebre con la frase: “El Estado soy yo.”). Como Eugenio tenía un físico nada agradable, ni el padre putativo, ni el padre biológico, sentían cariño alguno hacia él, y como le negaron el derecho de entrar a las tropas francesas, Eugenio partió hacia Austria para pedir que lo dejaran enlistarse contra los turcos, Austria dijo “Venga de ahí, dadas hasta puñaladas”, y ya una vez enlistado en el ejército austriaco y puesto al servicio de los Habsburgo, Eugenio brilló por su gran capacidad de estratega militar, ganando importantes batallas que hicieron replegarse al ejército invasor.

En Austria, Eugenio se hizo de una gran fortuna, la cual al morir, fue heredada por una sobrina de él a la que nunca conoció, y el esposo de ésta sobrina, despilfarró la fortuna de Eugenio en el póker.

Nadie sabe para quien trabaja.

Sea como sea, la mejor parte de la Historia es que puede ser recordada.

Y en su memoria, toca vibras de quienes por extrañas y secretas razones, se detienen un instante en ella.

La historia seguirá siendo la misma hasta el fin de los tiempos, pero las personas que la acarician, nunca podrán volver a ser las mismas….. en ellas resonará a perpetuidad, un vals hermoso llamado El Danubio Azul.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Mi postre favorito.

-¿Sí hola?- Dijo él con una voz cálida y sensual.

Yo que me encontraba de espaldas esperando encontrar a alguien delante de mí, volteé intempestivamente mientras pronunciaba: “Hey hola! Quería comprar un postre para llevar….”.

Y lo ví a él. Delante de mí. La clásica escena telenovelesca donde Ernesto Alonso ve por vez primera a Daniela Sofía.

Hermoso, realmente hermoso.

Mis movimientos torpes al momento de partir el postre hecho a base de manzana, delataban los nervios que su presencia me provocaban.

Pelo negro. Tez blanca. 1.80 mts. de estatura. Nariz perfectamente recta. Rasgos faciales bien definidos. Rostro ovalado. Tórax ancho en un cuerpo delgado. Ojos negros. Brillantes.

- El arroz que estás viendo está hecho a base de vino blanco y almendras.
- Hey! Qué delicioso suena!! Me llevaré un poco para comer mañana….

Y mientras yo estaba sirviendo la ración que iba a comprar, él detrás de la caja registradora, prende el cd y comenzó algo de antaño que dice: “Este amor llega así de esta manera….”.

Lentamente subí mi mirada al reconocer la canción, ví la suya, observé una ligera mueca de sus labios perfectamente delineados, coloqué mi pelo detrás de mi lóbulo derecho, desvié la mirada, miré el postre hecho a base de manzana, sentí la manera en que mi temperatura comenzaba a subir al ritmo de las notas musicales, imaginaba la manera en que ese joven hermoso muerde los labios al besar, y en medio de mis fantasías escuché un:

- ¿¿Te vas a comer todo eso jess?!?!?!?!.
........
........
........
- Sí papufo….

Pagamos y nos fuimos.

Ahora estoy enfrente del monitor, escuchando una y otra vez esa rola en youtube mientras degusto mi bocadillo dulce y pienso en ese hombre.

¿Será que el amor llega así de esta manera?
¿Acompañado de un postre hecho a base de manzana?

Lo único cierto es que hay postres que sin duda alguna representan una mayor tentación.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

No me olvides, Praga.

“Pero dice Sión: «Yahveh me ha abandonado, el Señor me ha olvidado.», ¿Acaso olvida una mujer a su niño de pecho, sin compadecerse del hijo de sus entrañas? Pues aunque ésas llegasen a olvidar, yo no te olvido. Míralo, en las palmas de mis manos te tengo tatuada, tus muros están ante mí perpetuamente.”
Isaías 49; 14-16.


El destino más anhelado de mi viaje, estaba ahí…. Frente a mí.
La ciudad que vio nacer a Kafka.
La ciudad donde experimenté en carne propia, mi propia metamorfosis.
Mi corazón latía intensamente segundo a segundo.

Nuestro guía nos dijo: “Praga es famosa por dos cosas: Porque tiene mujeres hermosas y porque tiene hombres malhumorados, los ciudadanos de la unión europea no entendemos cómo es que pueden tener mal humor si tienen hermosas nenas y buena cerveza.”. Ja!

Colocada geográficamente en un punto donde ha habido diversas demarcaciones territoriales y por tanto diversas denominaciones a su Nación.

Praga es considerada por algunos como el París de Europa del Este, por su “similitud” con la Ciudad de la Luz, así como el Senna atraviesa París, Praga es recorrida por el río Moldava.

Pero desde mi perspectiva, Praga es un cuento de hadas vuelto realidad.

La visita panorámica no puede hacerse en autobús (Gracias al Cielo!!!), el tour comienza en la parte más alta de la capital checa, que es la Catedral de San Vito con su estilo gótico, es increíble que una ciudad que tiene tantas iglesias, tenga un 80% de ateos en su población, todas las iglesias son propiedad del Estado, y por tanto, sólo hay pocas misas los días domingos o días de especial trascendencia religiosa, la propia Catedral de San Vito es custodiada por militares firmes y serios que hacen guardias del día entero, sin moverse un solo milímetro, sobra decir que dicho acto de custodia, es un honor para quien es elegido.

Saliendo de la Catedral bajamos por la calle llamada “Jan Neruda”, quien fue un escritor checo famoso por escribir “Cuentos de Malá Strana”, autor checo de quien después de haber leído su obra cumbre, el chileno Ricardo Neftalí Reyes Basoalto se inspiró para crear su pseudónimo de Pablo Neruda. Ehhhhh? Qué tal? Asombroso no? Eso no es todo… lo mejor está por llegar.

“Me gusta cuando callas, porque estás como ausente.”

Pero en esa parte turística de Praga no hay nada callado, todo es un continuo ir y venir, la algarabía de los residentes y de los turistas resuena alrededor.

Mientras uno baja por los callejones, se da cuenta de que la nomenclatura de las casas antiguas era sui generis, en lugar de tener un número tienen la figura que identificaba al residente, así si uno ve la figura de un pez, es que el dueño de la casa era pescador.

La moneda oficial de Praga es la corona checa, 240 coronas son aproximadamente un euro, y OJO las casas de cambio son tranzas a más no poder, no conviene cambiar los euros ahí porque te los toman baratísimos, lo que es más conveniente es tomar el cambio de los locales comerciales, les pagas en euros y te devuelven el cambio en coronas.

Como toda ciudad grande, uno debe tener cuidado con los carteristas, sobre todo en todos los tumultos humanos que se forman al ir descendiendo, al seguir bajando, llegamos al Puente Carlos… el cual está lleno de artistas que te pintan, o que te venden mil y un accesorios, y allí debajo de nosotros el río Moldava tan sereno como el atardecer que comenzaba a recaer sobre esa ciudad de ensueño.

En el puente Carlos hay una estatua famosa dedicada a San Juan Nepomuceno, es fácil de ubicar debido a que todos quieren tocarla, ya que trae suerte en el amor, ya saben yo estaba ahí cual vil garrapata tocando todo el tiempo que pude…. Y a un mes de estar ahí pidiendo enfáticamente que el amor llegara a mi vida… he de decir….. que debí haber regresado al día siguiente ja!... San Juan Nepomuceno fue un sacerdote beatificado debido a que fue confesor de una reina llamada Inés, quien era una mujer hermosa y adúltera, su esposo, al sospechar de sus cuernos, manda espiarla, y los espías no vieron que se encontrara con ningún hombre, sólo que se fue a confesar, el Rey manda llamar al confesor (Juan Nepomuceno) y le ordena decirle lo que Inés le confesó, Nepomuceno se niega rotundamente a violar el secreto de confesión, y el Rey lo manda matar.

Tengo mis serias dudas de que esa historia semi-romántica sea capaz de traerme el milagro de la disolución de mi muy preciada soltería, pero…. La mejor parte de viajar y conocer nuevas culturas, desde mi punto de vista, es inmiscuirte en los usos y costumbres del lugar. Sentirte parte de…. Yo me sentía toda una princesa checa reencarnada en simple ciudadana salmantina, que regresa a un lugar apreciado y amado tiempo atrás, ya saben, mi corazón, no olvida nada ni nadie que me haya hecho estremecer.

Del Puente Carlos descendemos hasta llegar al Reloj Astronómico Orloj que data del siglo XV y es el reloj más antiguo de Europa, tiene la peculiaridad de dar la hora en no sé cuántos idiomas astrológicos, y además, cada hora, de 9 am a 9 pm, tiene música y salen unos monitos muy simpaticones ahí bailando y negando con la cabeza, eso se interpreta como un aviso a la población, de decirle que No deje entrar los vicios y pecados capitales a su vida y a su cuerpo, luego de que termina la música del reloj, arriba hay hombres con trompetas anunciando que se ha terminado ese momento.

Y todos los observadores, aplaudiendo enfáticamente al finalizar dicho acto.

De verdad, pareciera uno que vive dentro de una historia de “Érase una vez…..”.

Al día siguiente, que era día libre, yo quería regresar a San Vito, pero Fmi y yo estábamos exhaustos del día anterior y decidimos sentarnos a orillas del Río Moldava, en un paraje lleno de árboles donde los oriundos del lugar pasaban a pasear o a ejercitarse.

Ahí sentada, viendo de fondo la Catedral de San Vito vi pasar a la mujer más hermosa que vi en todo mi viaje.
Minifalda blanca con rojo, playera pegada roja y de tirantes, zapatos de tacón rojos, labial rojo en sus labios, pelo perfectamente bien recogido en una cola de caballo…. Nariz perfectamente respingada, piel trigueña, pelo lacio y castaño, ojos verdes, piernas bien torneadas, busto generoso, trasero firme y mejillas bien definidas.

Después de cinco minutos de que siguió su rumbo, Fmi volteó a ver mi muy notable cara de envidia y frustración, y me dijo: “jess, ya reacciona!!!! O sea, we, mira ahí está el río, suicídate porque la vida es injusta contigo al hacerte admirar a una mujer realmente hermosa que contrasta con tu físico y …”, “Suficiente cabroncito, ya entendí la idea…. Jum!!”.

Fmi y yo, cada uno en silencio, trabajaba con sus propias impresiones y sensaciones debajo de las hojas de árboles que estaba encima de nosotros.

"Me gusta cuando callas, porque estás como ausente...."

Y sin saber cómo ni cuándo, en la banca contigua a nosotros, se sentaron un grupo de hombres checos.

No eran modelos precisamente jiji sino todo lo contrario, eran hombres que regresaban a sus casas de trabajar, que tenían su piel impregnada de ollín, sus ropas sucias denotaban la ardua jornada laboral, su pelo mal acomodado, platicando en su idioma natal, de sólo Dios sabe qué, pero estaban todos absortos los unos con los otros.

No sé si notaron mi curiosa mirada, pero yo imaginaba que su plática encajaba perfectamente con mi cuento de hadas, y platicaban acerca de leyendas acontecidas en lo alto de San Vito.

Gracias al Cielo que en Praga nos hospedamos en un muy lindo hotel, y nos tocó pernoctar en el piso 15 que nos permitía una espectacular vista panorámica nocturna de la Ciudad.

Las mejores papas que probé en toda Europa, estaban incluídas en el desayuno de ese hotel.. mmmmm, cocinadas con paprika mmmmmm….

A la mañana siguiente, era hora de partir.

Estaba yo con mi equipaje afuera de mi habitación, pensando en mis vidas pasadas, en mi aprendizaje presente, en mis sueños futuros, cuando motivada por un impulso, corrí al tocador colocado al lado de mi cama, tomé el lápiz que había, y en la libreta de apuntes del cuarto, dejé anotadas las cuatro palabras con las que se titula este post, y mi nombre al final.

Epílogo.- ¿Cómo podría olvidarte yo a ti, si te tengo tatuada no sólo en las palmas de mis manos, sino en mis ojos y en mi memoria? ¿Cómo podría olvidarte si tus diversas edificaciones han estado ante mí desde esa primera vez en que te recorrí y te hice mía, y me hiciste tuya? Es por eso que ahora, regreso a ti.

Ya no soy aquella princesa protagónica que te desnudó y a quien le obsequiaste lo mejor de ti, ahora el tiempo ha pasado y mi metamorfosis ha dado frutos, ahora regreso nuevamente a ti a ofrecerte a mi pequeño príncipe, hazlo tuyo así como me hiciste tuya, imprégnate en sus manos, ojos y memoria, así como lo hiciste conmigo, muéstrale tu gloria y esplendor, así como me los mostraste a mí antaño.

Vive a perpetuidad a través de su sangre, que es la mía, que es la tuya, que es la nuestra.
La vida debe continuar.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Take my breath away.

"Take my breath away."
Berlin.

-¿Señorita jess rabbit?
-¿Sí dígame?
-Aquí está la llave de su habitación… y… tiene un mensaje telefónico.
-Mmm?? Seguro que es para mí?
-Yeap.

Y ahí, en la capital alemana, a no sé cuántos kilómetros de distancia de mi hogar, después de once años de haber egresado de la preparatoria, tuve noticias de un compañero de aulas, con el cual crucé acaso cuatro saludos durante los tres años que compartimos estancia estudiantil.

Todo lo que conocí de Berlín, lo conocí por él.

Es increíble la manera en la que el primer mundo puede moldear a las personas.

No queda nada de aquél joven que conocí a los quince años, y he de agradecer profundamente, la amabilidad que tuvo para conmigo y con mi hermano, siendo que nunca fuimos juntos a alguna fiesta, ni nos juntamos en algún trabajo de equipo, ni supimos nunca nada de la vida del otro.

En dos días, llegué a conocerlo más que en tres años.

Y en dos días, la historia se impregnó en mí, más que en 28 años.

Debido a la influencia hollywoodense, había odiado por años, la historia de la Segunda Guerra Mundial, estaba literalmente harrrrrta de escuchar frases de: “Pobres judíos”, “Malvados nazis”, “Los States salvaron al mundo del Führer”, bla bla bla bla bla bla bla bla…. Buaaaaaj!!!!

Pero, no hay nada como llegar a la escena del crimen para que uno pueda estar en contacto con la historia de la humanidad y con sus cicatrices.

Si antes admiraba al pueblo alemán, regresé boquiabierta de lo que una mentalidad de primer mundo puede lograr.
En tan sólo 65 años, con un país destruído, vencido y en escombros, se levanta una Alemania fuerte, poderosa, inteligente, increíblemente avanzada, que sigue siendo potencia mundial.

Siempre he creído que la energía no se crea ni se destruye… y ahí, en territorio alemán, todavía puede sentirse los saldos de un país mutilado, dividido, fraccionado.

Un pueblo que no se siente orgulloso de los actos pasados, que trata de no ver hacia atrás para no perder de vista el futuro ni el punto donde se encuentran, pero que recuerda, instante tras instante, los cimientos sobre los cuales están construídos sus nuevos edificios.

Berlín tiene muchísimos atractivos para los turistas.

Si alguno de ustedes tiene planes de conocerlo, es recomendable visitar La Isla de los Museos, los días jueves, la entrada es gratuita, y allí tienen especial relevancia el Museo de Nefertiti y otro museo que no recuerdo cómo se llama, donde uno puede ver las puertas originales de Babilonia (con una antigüedad de cinco mil años!!!) o las puertas del mercado de Mileto (IMPRESIONANTES).

Como todos saben, Alemania también es país puntero en tecnología, así que también es una parada obligatoria conocer Potsdamer Platz, que es un conjunto de centros comerciales, donde se encuentra el Sony Center y una infinidad de restaurantes no tan caros (precio promedio de cena por persona, 20 euros).

Otra parada obligatoria es el clásico muro de Berlín (lo que queda de él) que dividía a la Alemania Occidental de la Oriental. Aún a la fecha, los propios habitantes de Berlín pueden distinguir quién vivía o vive en cada lado del muro, y dato curioso, no se casan los de un lado con los del otro.

A las afueras de Berlín se encuentra un campo de concentración, que tiene entrada libre, pero donde todavía se sienten las vibras dolorosas de quienes estuvieron allí en 1940.

Yo fui debido a que Fmi quería conocer, pero la verdad es que es una experiencia desgarradora, mi pobre corazón de pollo no podía soportar las visiones de lo que ahí se vivía años atrás.

Durante la visita guiada, el guía local nos dijo que el alcalde de Berlín decía que Berlín era “pobre pero sexy”, al escuchar esto, Fmi se quedó boquiabierto, pegado a la ventana del autobús y diciendo: “Queeeeeé?!?!?! esto es pobre?!?!?! Si conocieran Salamaranch, dirían que es ultra jodido y ultra horrible!!!!!”.

El medio de transporte más usado en Berlín, es el metro.
Para quienes no sepan, el metro de Berlín funciona así: Compras tu ticket en las maquinitas, te da la opción de que sea para un viaje corto (tres estaciones) o para todo el día, o toda la semana o todo el mes, ya una vez que lo eliges y lo pagas, tienes que validarlo, que no es otra cosa que ponerle el sello y la hora en que compraste el boleto, a través de una impresión que es estampada a través una máquina colocada al lado de la primera donde compraste tu boleto.

Para subir al metro no te lo piden como en París sino que confían en tu buena fé. Pero, hay inspectores de metro disfrazados de civiles que hacen rondas por todo el metro, y si te piden tu boleto y no lo traes, o está caduco, te haces acreedor a una multa de cuarenta euros.
El metro es algo difícil en Berlín, ya que una buena parte es subterráneo, y otra parte es por arriba.
Así que uno tiene que ponerse buzo para no ir a dar a una dirección equivocada.
De lunes a jueves, el metro termina a la una am, y de viernes a domingo, hay servicio de metro a todas horas.

Ya saben, la vida nocturna llama. ;)


La vida nocturna de Berlín es todo un show.
Es una ciudad muy reventada con increíble cerveza.
La cerveza alemana es una verdadera delicia…. Sólo en Alemania probé mejores sheves que las mexicanas, y miren que ya es decir!!!

Y para los caballeros, también hay una diversión sui generis.

Si en Ámsterdam, las mejores nenas de las vitrinas cobraban cien euros la hora, en Berlín cobran ochenta euros la hora.
En una calle que no recuerdo su nombre jiji, puede uno observar a mujeres altísimas (rusas y checas) con increíbles piernas larguísimas, cintura de aproximadamente 50-60 cm, envueltas en mini shorts o minifaldas de charol y un top igualmente de charol.

Y ahí en Berlín, fue donde encontré el monumento más hermoso para mí de todo mi viaje….. a unas cuadras del monumento al Holocausto (2100 bloques de concreto de diferentes tamaños en homenaje a los 2100 sobrevivientes de los campos) se encuentra la puerta de Brandenburgo.

Realmente, es algo impactante.
Sobre todo de noche.
Todavía cierro los ojos por la noche, y la veo ahí, dorada, brillante, con sus cuatro caballos en su parte superior, con sus columnas, con toda su historia detrás de sí….

Partiendo de Berlín, hicimos parada en Dresden, otra muy pintoresca ciudad alemana.

Fmi y yo bajamos para comprar una salchicha y para conocer sus diversas plazas.
Mientras comíamos en una banca, vimos pasar un helicóptero que volaba muy bajo.

Fmi: ¿Qué tienes jess? ¿Por qué te quedas pensativa?
jess: Es curioso….. no me gusta escuchar ese helicóptero….. hace 65 años un sonido singular se escuchaba en este mismo sitio y era el sonido del terror….
Fmi: ……. Qué increíble y didáctica es la historia alemana ¿no?
jess: Sí, me ha dejado muy pensativa.
Fmi: jess!!! Come rápido tu salchicha y deja de tristear!! Mira la hora!!! Es hora de partir a…. Praga!!!!!

Mientras corría al autobús volteé por última vez al territorio alemán, volví a escuchar otro helicóptero, cerré los ojos y vi la puerta de Brandenburgo, me puse mis lentes oscuros, y sentí una lágrima recorriendo mi mejilla derecha.

Simplemente, Alemania me había robado el aliento.